Es sólo una crisis de personalidad en una noche, but I like.
20/04/2023
En el café-bar del The Carlyle, A Rosewood Hotel, un lujoso establecimiento de New York ubicado en la avenida Madison a una cuadra del Central Park, en un mundo al filo de un acontecimiento que lo pondría, en mayor o menor medida, en cuarentena, David Johansen, bajo el mote de BusterPoindexter (alter ego de ocasión…) ofreció una serie de shows a la vieja escuela. En un pequeño escenario y acompañado con una banda de viejos amigos de ruta y de la música en su expresión más folk y de profunda raíz norteamericana, una vez por semana se darían cita ante una pequeña concurrencia, que acomodada en mesas y con tragos siempre a mano, disfrutaría de un puñado de canciones con las cuales viajar a lo largo de una enorme carrera. Desde finales de los agitados años ´60´, entre The Factory y el nacimiento de los Rolling Stones y los Stooges, pasando por la explosión heavy y punk de los ´70 y ‘80, la fiebre festivalera de los ’90 y el revisionismo del comienzo del siglo XXI, en cada encuentro se desgrana una historia que, como buen crooner, Johansen irá condimentando con comentarios, anécdotas, recuerdos e intervenciones de todo tipo. Cada canción ofrece a nuestro anfitrión el puntapié inicial para comenzar, continuar y finalmente concluir este extenso arco narrativo. En el principio, habría que mencionar dos acontecimientos: su experiencia como empleado de una compañía de teatro absurdo, y el momento en que dos enormes desconocidos tocan a su puerta una noche. En ese entonces Johansen vivía, según sus propias palabras, en un departamento en el que la puerta de ingreso daba al baño que era a la vez la cocina. En menos de un minuto, se formarían los New York Dolls, a quienes Todd Rundgren les produciría su primer álbum homónimo y quienes con solo dos discos llegarían a influir a generaciones de músicos y allegados a la cultura rock. Las composiciones de los Dolls eran tarea casi exclusiva de su cantante, quien después del ’75, año en que la banda se separa, continuaría componiendo hasta nuestros días, que lo encuentran con 73 años transitando los géneros más diversos, pero siempre ligados a las fuentes o derivas del rock and roll.
Martin Scorsese quizás sea uno de los cineastas más importantes con un interés real (hecho películas…) en documentar la historia del rock and roll. Él mismo cuenta que, invitado por la esposa de Johansen, al asistir a una de las fechas decidió hacer un registro sin una intención precisa. Para ello convocó a David Tedeschi, su compañero histórico en estos menesteres, y registraron algunas de las presentaciones sabiendo que lo que allí sucedía era en sí mismo un testimonio que debía ser documentado. El resultado, después de dos años atravesados por el coronavirus en el que se sumó material audiovisual de archivo y entrevistas realizadas a Johansen por su hija y su esposa, es un reciente estreno en streaming titulado “Personality Crisis: One Night Only”. La aparente simpleza y liviandad con que transcurren las dos horas de la película, en verdad expresan el virtuosismo con que la dupla a cargo de la dirección supo leer el carácter discreto y la economía de recursos que maneja su protagonista. El ensamblaje entre las partes compuestas por las entrevistas, el show en sí mismo y el material de archivo, conforman una unidad narrativa y formal que está siempre al servicio de una obra que, desde el presente, es el retrato vivo de una historia y una época. Los extensos créditos dan cuenta de la cantidad de personas que han trabajado para que la película pueda ser lo que es y contar un arsenal de materiales tan diversos. Como ejemplo, vale la mención del excursus que toma la narración cuando se menciona el vínculo entre Johansen y Harry Smith, autor de la “Antología de Música Folk Americana”, publicación histórica de 1956 que compiló grabaciones de canciones populares entre 1925 y 1932, convirtiéndose, aún hoy, en una de las fuentes más extraordinarias al respecto, de la que bien supo abrevar, entre otros, un joven Bob Dylan.
Es mucho más lo que hay por descubrir en esta historia. “Personality Crisis: One Night Only” espera y nos invita, trago en mano, a conocerla entre canción y canción.
Crítica de Matías Lapezzata
Trailer
Este documental se puede ver en la plataforma Showtime.
